El 18 de Julio de 1936
empezaba la Guerra Civil Española, uno de los acontecimientos más
trágicos de nuestra más reciente historia. En este artículo vamos
a repasar qué ocurrió en la ciudad de Granada en esos primeros días
de guerra y concretamente en todo lo relativo a los bombardeos que
sufrió la ciudad.
En los últimos tiempos
ciudades como Jaén, Almería, Cartagena, Cuenca, Madrid y un largo
número por toda le geografía española están poniendo en valor los
refugios que usaba la población para protegerse de los bombardeos de
la aviación enemiga. Granada no fue ajena a los bombardeos, y sin
bien no nos constan que a fecha de hoy queden en pie refugios de uso
público o que se construyeran a tal efecto al menos en la capital,
sí tenemos numerosos espacios que lo fueron usados como tal,
asimismo y consultando las noticias de la época nos hemos hecho una
radiografía de cómo fueron esos bombardeos, de dónde cayeron las
bombas y de los daños que ocasionaron. Nos hemos ceñido a Granada
capital, por la valiosa información que nos brinda el diario Ideal,
que si bien claramente se posicionaba con el bando sublevado, sí
debemos darle cierta credibilidad al menos en la información
relativa a las bombas caídas, acompañadas de fotos de época en
algunas de la ocasiones.
El objetivo principal de
la aviación atacante que en este caso era la Republicana o
gubernamental al haber quedado Granada en manos de los militares, era
el aeródromo de Armilla, sin embargo muchas bombas cayeron en zonas
residenciales sin ningún tipo de valor militar, esto se debe a que
la Guerra Civil Española fue la primera en la que la aviación y los
bombardeos formaban parte de las batallas, la exactitud de algunos
pilotos brillaba por su ausencia, además los aviones que llegaban a
Granada además de bombardear sus objetivos, tenían que esquivar a
la aviación enemiga que rápidamente y en cuanto sonaba la alarma
despegaban precisamente del mencionado aeródromo.
Pero sin más preámbulo
veamos como transcurrió la historia de los bombardeos de la Guerra
Civil Española en la ciudad de Granada. El punto de partida en
Granada no es el 18 de Julio como en otras ciudades sino el 20 de
Julio que es el día en el que la máxima autoridad militar de
Granada el Comandante Campins presionado por Queipo de Llano y por
los militares sublevados firma el Bando de Guerra.
La primera noticia que
tenemos sobre aviación ocurre el 26 de Julio de 1936, en esta
ocasión es un avión franquista el que despegando desde el aeródromo
de Armilla, se dirige a la Alpujarra, a la localidad de Orgiva, y
amedrenta a los ciudadanos fieles a la Republica, y que estaban
provocando alboroto, estos huyen del pueblo y se refugian en la
Sierra de Lugros, dónde son perseguidos y ametrallados por el avión.
El aeródromo de Armilla,
hoy base aérea era uno de los puntos claves en la toma de la ciudad
junto a la fábrica de pólvora del Fargue, cuando los soldados
franquistas llegan a Armilla no se encuentran resistencia, pues los
soldados han abandonado las instalaciones no sin antes destruir los
aparatos que allí había, sin embargo días después tres aviones
Republicanos llegan por el cielo desde Madrid en misión de
reconocimiento y son engañados por los soldados que hay en el
aeródromo haciéndose pasar por amigos, al aterrizar, sus pilotos son
capturados, además con las piezas que hay en el aeródromo se
consiguen arreglar algunos de los aviones saboteados, de esta manera
el ejército franquista ya tenía sus primeros aviones con los que
fortalecer el alzamiento.
Días después leemos en
la prensa del Ideal como uno de estos aviones del aeródromo de
Armilla, sufre una pequeño accidente y se ve obligado a aterrizar
en Trasmulas. Un labrador de nombre D. Luis González Cabezas,
presencia el incidente y viendo como personas fugadas de Granada
intentan llegar al avión con “malas intenciones”, socorre y
auxilia al piloto que tiene algunas lesiones y en su carro y gracias
al conocimiento de la zona y de los caminos consigue ponerlo a salvo
y llevarlo de vuelta a Granada.
En estos primeros días
también leemos como los aviones franquistas hacen una primera
incursión en Loja, que se encuentra en manos de los Republicanos y
lo bombardean, sin que se mencione nada respecto a los daños
ocasionados. Loja será rápidamente tomada y se producirá la unión
entre Sevilla y Granada lo que permitió el suministro de víveres,
armas y soldados a la ciudad de Granada que quedó aislada cuando el
alzamiento paulatinamente fue fracasando en todas las cabezas de los
diferentes partidos judiciales.
El 25 de Julio uno de los
aviones que se encuentran en Granada vuela hasta el estrecho para
bombardear algunos barcos que allí se encuentran, al regreso es
perseguido por un avión Dornier, en el combate consigue ametrallarlo y lo derriba. De este mismo día 25 de Julio tenemos
noticias de más bombardeos por parte de la aviación franquista, dos
aviones regresan de la bahía de Málaga dónde han bombardeado a un
barco sin que se sepa el resultado final por la densa humareda que ha
desprendido. Iznalloz es intensamente bombardeada y muchos vecinos
sacaron banderas blancas en señal de rendición, para terminar y
según el Ideal Guadix también fue bombardeada ese día dónde gran
número de fuerzas hostiles se han hecho fuertes.
|
Efectos de los Bombardeos en el Hospital Clínico. Fotografía de Torres Molina. Fondos de la Biblioteca Nacional de España. |
PRIMER BOMBARDEO EN
GRANADA CAPITAL. 29 de Julio de 1936
El 29 de Julio de 1936 se
produce el primer bombardeo en la ciudad de Granada, seis aviones
provenientes del aeródromo de los Alcázares, arrojaron varias
bombas sobre San Cristóbal, el Hospital de San Juan de Dios, el
Hospital Clínico, convento de Trinitarias, Cerrillo de Maracena,
Aeródromo de Armilla, Fargue y Víznar. Como consecuencia de ello se
producen las primeras víctimas por bombas en la capital.
Los aviones aparecieron a
las nueve de la mañana identificados con una franja roja, cuatro de
ellos eran bombardeos y los otros dos daban cobertura y protección.
La penetración en la ciudad se hizo a través de la Sierra de
Harana. Estos aviones además de las bombas arrojaron unas octavillas
que invitaban a la población a rendirse ante la llegada de cuatro
columnas de soldados republicanos a la ciudad, sin embargo el número
de octavillas que cayó sobre la ciudad fue muy escaso.
Una de las bombas cayó
en las obras de la Facultad de Medicina y el Hospital clínico,
exactamente en uno de sus patios provocando el fallecimiento de dos
obreros e hiriendo a otros dos obreros; Jose María Ruiz, montador de
ascensores y bilbaíno, y Luis Barranco Linares, albañil de
Maracena.
La bomba que cayó en el
Cerrillo de Maracena causó la muerte de dos obreros e hirió a una
mujer; María Ibáñez Romero con fractura de tibia y peroné, y a un
niño; Rafael Martínez Gómez que fue herido en la parte posterior
de una pierna.
La bomba que cayó en la
zona del lavadero del Hospital de San Juan de Dios, causó un gran
susto y daños materiales en uno de sus muros.
En el camino de San
Antón, en la huerta de la Cisterna cayó otra de las bombas con
daños tan sólo en unas parras.
En el convento de las
Trinitarias dónde recibían clase unas cincuenta niñas,
afortunadamente y con el ruido del combate aéreo que se estaba
produciendo, se refugiaron en la capilla, cayendo posteriormente una
bomba, justo en el lugar en el que estaban dando clase sin provocar
ningún tipo de daño personal.
El otro de los grandes
objetivos de ese día era el aeródromo de Armilla, sin embargo las
ametralladoras que lo defendían, consiguieron persuadir al enemigo y
facilitaron el despegue de dos de los aviones que allí se
encontraban. Se produjo en este momento un combate aéreo que fue
visto por todos los granadinos que se encontraban en espacios
abiertos y que no se habían refugiado. Tres de los seis aviones
republicanos que habían llegado fueron dañados. Uno de los aviones
cayó en Iznájar (Córdoba) y los otros dos tomaron tierra en
Guadix. Mientras esta batalla tenía lugar, otro avión más del
bando franquista dio vueltas alrededor del aeródromo de Armilla para
protegerlo de otros posibles ataques.
El balance de este primer
día fue de cuatro fallecidos y cuatro heridos de consideración.
Días después el obrero Luis Barranco Linares falleció, lo que
elevó el número de víctimas mortales a cinco.
Tras este primer
bombardeo por las autoridades de la ciudad se dieron una serie de
recomendaciones en caso de nuevo bombardeos.
La sirena de Diputación
avisará del ataque con un toque largo y varios cortos, los
ciudadanos deberán refugiarse en las partes bajas de las casas, y
los que se encuentren en exterior o en el campo deberán tenderse en
el suelo. La noticia habla de la improbabilidad de nuevos ataques. De
esta lectura comprendemos por qué en Granada no hay refugios
públicos como en otras ciudades, pues no se consideró nunca que
Granada fuera a ser un objetivo muy castigado y ciertamente la guerra
pronto giraría hacia otros destinos, quedándose aquí un frente de
guerra algo más tranquilo. No obstante hasta mediados de Agosto la
capital granadina seguiría siendo atacada. Respecto a los refugios,
tal y como recomendaban las autoridades, los ciudadanos habilitaron
espacios en los bajos de las casas, o usaron espacios ya existentes
como viejos aljibes o sótanos, las criptas de las Iglesias (Sagrario
o Catedral) fueron usados a tal fin, incluso en la Alhambra la Cripta
del Palacio de Carlos V hizo la funciones de refugio, el teatrillo
del Alhambra Palace que vio actuar a grandes como Manuel de Falla, Andrés Segovia o el mismísimo Federico García Lorca, por su
ubicación en la planta baja y en interior fue otro de los espacios
que hicieron esta labor.
|
Calle de Gracia. Fotografía de Torres Molina. Fondos de la Biblioteca Nacional de España |
|
Calle de Gracia. Torres Molina Fondos de la Biblioteca Nacional de España. |
SEGUNDO BOMBARDEO EN
GRANADA CAPITAL. 30 de Julio de 1936.
A las siete y media de
las mañana dos aviones procedentes de los Alcázares llegaron a la
ciudad de Granada, rápidamente la sirena de la Diputación sonó, y
los transeúntes y personas que a esas horas circulaban por la ciudad
se refugiaron en portales, casas, y tiendas. Rápidamente desde el aeródromo de Armilla partieron otros dos aviones que les dieron
persecución y caza derribando a uno de los atacantes cerca de
Iznalloz, concretamente en la confluencia del río Cubillas con el
río Bular. El otro avión consiguió huir en dirección a los
Alcázares.
Una de las bombas cayó
en la calle Gracia esquina con Verónica donde falleció un
barrendero que iba con su borrico, Manuel Pérez Rus de 45 años de
edad.
La otra víctima se
produjo en el número 25 de la misma calle de Gracia, donde una mujer
que venía de comulgar en la próxima Iglesia de la Magdalena fue
alcanzada por la metralla, Estefanía Romero profesora de profesión
y que vivía en el número 31 de la citada calle.
En el mismo lugar hubo
dos mujeres heridas de gravedad, Trinidad Álvarez Moreno de Churriana
de la vega, soltera y que vivía en el número 36 donde ejercía de
sirvienta, y Dolores Bolilla Galindo portera del número 28 y que
perdió el dedo pulgar. El borrico de la primera víctima que resultó
herido fue rematado de un tiro por un vecino.
Esta bomba cayó en el
centro de la calzada y causó numerosos daños en todas las viviendas
que había, prácticamente todos los cristales se rompieron y hubo
muchos herido leves que no necesitaron de ayuda hospitalaria.
Otra de las bombas caídas
en ese día impactó en la calle Pegarrecio nº 2, entró por el
tejado perforándolo y explotó al chocar con el piso. En la casa
había cuatro personas que afortunadamente no sufrieron daños de
gravedad.
En el cuartel de las
Palmas impactó otra de las bombas, lo hizo en la esquina de un
garaje que se encuentra dentro del recinto, gran parte de la metralla
atravesó la persiana metálica e impactó en un coche que había
allí aparcado, ni un guardia civil que andaba por allí ni el chofer
del coche sufrieron daños. Curiosamente el garaje se estaba
adaptando para acoger a las numerosas familias de Guardias Civiles
que habían huido de zona Republicana.
En una haza de tierra en
la Avenida de Cervantes frente al Hospital de Nuestra Señora del
Pilar, cayó otra de las bombas que no causó ningún daño.
En la calle Cifuentes
número 17, en una casa deshabitada cayó oro de las bombas que
impactó en el patio y no causó ningún daño personal.
En la fábrica de Gas
situada al final de la calle San Antón, cayó otra bomba que no
causó daño alguno.
En este mismo día y a
las siete y media de la mañana uno de los dos aviones atacantes en
su aproximación a Granada arrojó una bomba en Beas de Granada en
una haza dónde estaban padre e hijo guardando el ganado y que
produjo la muerte del niño de ocho años de edad y de nombre Juan
Mesa López.
|
Cuartel de las Palmas. Torres Molina Fondos de la Biblioteca Nacional de España. |
|
Cuartel de las Palmas. Torres Molina Fondos de la Biblioteca Nacional de España. |
TERCER BOMBARDEO EN
GRANADA CAPITAL.30 de Julio de 1936.
A las una y media de la
tarde se produjo la segunda incursión del día un avión trimotor
apareció en el cielo desde el sur y arrojó dos bombas que hicieron
impacto en la cochera de Tranvías y en el patio del cuartel de
Artillería. Esta bomba produjo la muerte del soldado Diego Sánchez
Quesada natural de Cabra del Santo Cristo (Córdoba), y causó
heridas de diferente consideración a gran número de soldados.
CUARTO BOMBARDEO EN
GRANADA CAPITAL. 31 de Julio de 1936.
Este día nuevamente a las
siete y media de la mañana seis aviones hicieron aparición sobre
los cielos de Granada, cuatro cazas vickers de bombardeo, un
sexquiplano y un caza. El objetivo principal de esta incursión fue
el aeródromo de Armilla, pero rápidamente los aviones franquistas
que estaban en la base elevaron el vuelo e hicieron replegarse a
estos aviones.
Los aviones republicanos
pudieron dejar caer varias bombas, que sin embargo no causaron daños
de consideración en el aeródromo, una cayó en una casa deshabitada
que se encontraba junto al campo de aviación.
QUINTO BOMBARDEO EN
GRANADA CAPITAL. 1 de Agosto de 1936
Sobre las once de la
mañana otros dos aviones Vickers, volvieron a aproximarse a Granada
y arrojaron una serie de bombas que cayeron sobre el Hospital de San
Lázaro. Una de las bombas cayó dentro de las salas pero no produjo
daños personales, aunque la metralla y la cantidad de cristales
rotos fue considerable. Una segunda bomba cayó en un patio exterior
y hubo noticias de una tercera que cayó en un olivar de la Carretera
de Jaén.
|
Hospital de San Lázaro 1 de Agosto 1936 Foto de Torres Molina. Fondos de la Biblioteca Nacional de España. |
SEXTO BOMBARDEO EN
GRANADA CAPITAL. 2 de Agosto de 1936
De madrugada otro grupo
de aviones arrojaron tres bombas sobre Granada, a su llegada la
sirena de Diputación avisó del ataque y las ciudades de la ciudad
fueron apagadas. Tres de las bombas cayeron cerca de Armilla
explotando una de ellas en un descampado y las otras dos no hicieron
detonación. Esto era algo habitual en aquellos años y muchas bombas
no hacían explosión por fallos en la fabricación de las mismas.
En la calle San Isidro
número uno cayó otra bomba que penetró por el tejado y explosionó
al impactar contra el suelo del primer piso. La casa estaba habitada
por la señora María Fernández Sánchez Molina y su hijo, fue
necesaria la intervención de los bomberos y una escalera para poder
sacar a la señora pues la casa sufrió numerosos daños. También
sufrieron daños de considerable importancia las casas de los números
62 y 64 de la Acera del Darro, colindantes en su parte posterior con
el inmueble afectado. Gran cantidad de cristales se rompieron, y se
desencajaron marcos de puertas y ventanas.
|
Calle San Isidro. Foto Torres Molina Fondos de la Biblioteca Nacional de España. |
Otra de las bombas cayó
en el número 7 de la Plaza Canasteros y que habitaba la familia del
ciclista Bailón. El inmueble que era de fábrica vieja quedó
destruido, la bomba penetró por el tejado y explotó en la planta
alta destruyéndolo todo, la caída del tejado, cascotes y vigas,
terminó por arrasar la vivienda, afortunadamente los habitantes de
la casa salvaron su vida milagrosamente. Los lesionados fueron; José
Bailón Morales, veinticinco años, chófer, contusión y pérdida de
uña en dedo anular. José Bailón Morcillo, cincuenta y seis años
y fractura de metatarsiano. Carmen Bailón Méndez, dieciocho años y
magulladuras. Rafael Bailón Morales, veintiocho años y
magulladuras. Manuel Bailón Morales, veinte años, herida fuerte en
cabeza. María Bailón Morales, cuarenta y seis años y herida en
dedo gordo del pie.
|
Casa del Ciclista Bailón. Foto de Torres Molina. Fondos de la Biblioteca Nacional de España. |
En el cruce de la calle
Puentezuelas con la calle Paz cayó la otra de las bombas que impactó
en una tapa de hierro del suelo, la metralla se disparó en todas
direcciones causando daños materiales en las fachadas de las
viviendas y matando a un gato que apareció destrozado.
Por último en la casería
de la Merced cayó otro artefacto que causó daños en algunos olivos
y en la línea telefónica.
De este último bombardeo
se apreció que algunas bombas no explotaban y que pertenecían a la
guerra de Marruecos, por lo que se dedujo que la aviación
Republicana no contaba con buen material de bombardeo.
Este mismo día y por la
noche hizo aparición en el cielo otro avión enemigo que se vio
obligado a huir ante la presencia de la aviación franquista, pudo
arrojar dos bombas sin consecuencias, una de ellas a las afueras de
Churriana que cayó en una era y no explosionó y la otra fue
arrojada cerca de Pinos Puente igualmente si causar daños alguno.
SEPTIMO BOMBARDEO EN
GRANADA CAPITAL. 6 de AGOSTO de 1936
A las cinco de la tarde
dos aviones sobrevolaron los cielos de Granada, al poco se oyeron
tres explosiones y sonó la sirena de Diputación que avisaba del
bombardeo. Los aviones huyeron en cuanto se vio amenazada por la
aviación franquista del aeródromo de Armilla.
La primera de las bombas
cayó en el centro de Fermentación de Tabacos que estaba instalado
en el viejo cuartel de Santo Domingo, por poco tiempo los más de 150
trabajadores que allí hay ya habían salido y tan sólo sufrieron
heridas un trabajador y una anciana.
|
Centro de Fermentación de tabacos. 6 de Agosto 1936 Foto de Torres Molina. Fondos de la Biblioteca Nacional de España. |
Otra de las bombas cayó
en el Carmen de la Justicia, en el mismo recinto de la Alhambra entre
la Puerta del Vino y la Puerta de la Justicia, destruyó gran
cantidad de cristales, pero no causó daños de consideración en el
monumento.
La tercera bomba cayó en
el jardín del Hotel Washington Irving, y sí causó víctimas , la
primera fue un botones que trabajaba allí y que murió en el acto,
posteriormente una señorita herida murió en el Hospital de San Juan
de Dios, hubo al menos cuatro heridos más de consideración.
|
Hotel Wasghington Irving. Foto Torres Molina. Fondos de la Biblioteca Nacional de España. |
Dos bombas más cayeron
en el Albaicín, una en Casas Coloradas que no causó daños y la
otra en la huerta de Albacena que causó heridas leves a una niña.
La peor parte de este día
se la llevó Maracena, allí cayeron cinco bombas que causaron 8
víctimas, una de las bombas cayó en la plaza del barrio Bajo y
causó la muerte en el acto de tres mujeres, y cinco personas
resultaron heridas y trasladadas al hospital de San Juan de Dios
dónde posteriormente otras dos fallecieron a causa de las heridas.
Otra de las bombas cayó en la casa de D. Francisco Martínez
Cañavate y produjo grandes daños, en la Casería del Conde, cayeron
dos sin causar daños materiales y la última de las bombas cayó en
las Mimbres sin causar tampoco daño alguno.
OCTAVO BOMBARDEO EN
GRANADA CAPITAL. 7 de Agosto del año 1936.
Sobre las siete de la
tarde un avión republicano sobrevoló la ciudad de Granada y arrojó
cinco bombas. Una de ellas cayó en la avenida de la República cerca
del fielato de San Lázaro, donde produjeron la muerte a varias
mujeres modestas y varios heridos. Otra cayó en el cuartel de
Artillería causando daños materiales con varios soldados con
heridas leves por los cascotes y los cristales. Cerca del cuartel
cayeron otras dos bombas sin más consecuencias y la quinta bomba
cayó en la casa número 13 de Cardenal Mendoza donde resultaron
heridas varias vecinas, una de las cuales falleció posteriormente en
el Hospital Clínico.
NOVENO BOMBARDEO EN
GRANADA CAPITAL. 8 de Agosto del año 1936.
En primer lugar hubo una
incursión a las doce de la mañana, aunque ante la salida de los
aviones de la base aérea de Armilla tuvieron que huir no si antes
arrojar cuatro bombas. Una de ellas cayó en el número 20 de la
Cruz Blanca, penetró por la Chimenea y causó numerosos daños que
provocaron la ruina y posterior derrumbe del inmueble. Sólo hubo
heridos leves. Otra bomba cayó en una huerta de Cartuja sin llegar a
explotar, y las otras dos cerca de la Carretera de Jaén también si
provocar ningún tipo de daño material ni humano. En este mismo día
sale publicada que del bombardeo del día anterior dos de los
heridos fallecen en el Hospital de San Juan de Dios.
DECIMO BOMBARDEO EN
GRANADA CAPITAL. 9 de Agosto de 1936.
Ese día fue movidito en
la ciudad de Granada, la primera incursión se hizo a las ocho de la
mañana, pero los aparatos republicanos huyeron al ser interceptados
por los aviones franquistas de la base aérea de Armilla.
Posteriormente y a las
once y media de la mañana hubo una segunda incursión cinco aviones
enemigos, un número bastante alto, sin embargo en combate aéreo los
aviones de la base aérea de Armilla derribaron a dos de los aparatos
atacantes. Es curioso y tal como cuenta la prensa de época que los
ciudadanos en vez de refugiarse en los bajos de las casas tal y como
establecían las órdenes de la comandancia militar presenciaban con
entusiasmo los combates aéreos entre los diferentes aviones.
Por el resto de los
aviones se arrojaron gran número de bombas cerca de la base aérea
de Armilla, pero no causaron daño alguno, incluso muchas de ellas no
llegaron ni a explosionar. Otra de las bombas cayó en el cuartel de
Infantería de la Merced, pero sin llegar tampoco a explosionar. En
la barriada de Fígares o cerca de la Carretera de Jaén cayeron más
bombas pero sin causar ninguna de ellas daños alguno.
Quizás la bomba más
significativa fue la que cayó en el interior del Colegio de
Notarios, causando daños leves al hijo del conserje y grandes daños
en cristales y elementos del bonito edificio como la fuente o los
azulejos del patio inferior o algunas columnas o la escalera de
mármol.
|
Interior del Colegio de Notarios. Foto de Torres Molina Fondos de la Biblioteca Nacional de España |
UNDECIMO BOMBARDEO EN
GRANADA CAPITAL. 10 de Agosto de 1936.
El diez de Agosto se
produce una nueva incursión de la aviación republicana, al ser
sorprendidos por los aparatos de la base aérea de Armilla huyen, no
sin antes arrojar varias bombas en el barrio de la Cartuja, dónde
causan varias víctimas mortales.
En Hornillo de Cartuja,
concretamente en el número 16 cayó una bomba en el centro de la
calle que mató a un hombre que estaba sentado en una silla, así
como dos niños que estaban jugando en el dintel de una puerta de una
casa próxima y un número indeterminado de transeúntes que pasaban
por el lugar. Dentro de la casa en la que vivían varias familias se
produjeron muchos heridos y tres muertos.
La casa número 11 de la
calle también fue alcanzada causando la metralla numerosos heridos.
En la casa número 14 dos niños fueron heridos pero sin lamentar
desgracias. En la número 12 falleció un muchacho de dieciocho años.
En la casa número 4 cayó otra bomba que no llegó a explotar.
|
Calle Hornillo de Cartuja. Foto de Torres Molina. Fondos de la Biblioteca Nacional de España. |
Ciertamente y tal como
cuenta la prensa del día este fue de los bombardeos con mayor número
de víctimas y heridos al caer varias bombas en una misma zona muy
poblada y con casas humildes.
En el pilarillo que hay
bajo los jardines del triunfo frente a la placeta de canasteros cayó
otra bomba que no llegó a explotar.
En Cartuja junto a la
fachada del Colegio máximo de Cartuja cayó otra bomba que causó
daños materiales leves en su fachada.
Volviendo a Cartuja en la
casa número 20 de la Calle Real de Cartuja cayó otro artefacto que
no causó víctimas aunque sí hubo luego que derribar la casa. La
casa 22 colindante con la anterior tuvo que se desalojada por
amenazar ruina.
Al margen de los
bombardeos empezamos a leer en la prensa del día como están siendo
ejecutados los presos políticos en represaria por los bombardeos.
Hasta treinta personas en una sola noche en uno de esos fatídicos
“paseillos”. De hecho los presos escriben y firman una carta
pidiendo que cesen los bombardeos, uno de los firmantes es Manuel
Montesinos, ex-alcalde de la ciudad, cuñado de Federico García
Lorca y que no pudo evitar con ello ser fusilado el día 16 de Agosto
de 1936.
DUODECIMO BOMBARDEO EN
GRANADA. 11 y 13 de Agosto de 1936
En esta ocasión no hay
bombardeo aunque sí intento dos aviones penetran en Granada, pero
son rápidamente ahuyentados por los aparatos de la base aérea de
Armilla. En esta ocasión no arrojan bombas.
Al día siguiente 13 de
Agosto se produce el mismo hecho, dos aparatos intentan entrar a las
ocho de la mañana, pero no tienen éxito al ser detectados y
rechazados, arrojaron varias bombas sobre el pueblo de Cogollos vega
sin causar daño alguno.
DECIMOTERCER BOMBARDEO EN
GRANADA. 14 de Agosto de 1936
A las nueve de la mañana
dos aparatos aparecen sobre Huétor Santillán dirección a Granada,
la sirena de la diputación rápidamente empieza a sonar y varios
aviones de la base despegan para repeler el peligro.
Una de las bombas
arrojadas por los atacantes cae en la casa número 36 de la Calle
Parra Alta de Cartuja donde causó más daño a todas las gallinas
que mató que a una mujer que resultó con heridas leves.
También y por cercanía,
cerca de la calle Hornillo de Cartuja cruelmente castigada en días
anteriores cayó otra bomba en el número 26 de la calle de los Locos
causando varios heridos de diversa consideración.
Precisamente una de las
quejas en esos días es que la sirena de Diputación no se llega a
oír en los barrios más alejados y por tanto a la población no le
da tiempo de refugiarse hasta que no oyen caer las bombas.
Solicitándose que sean las campanas de la Catedral las que den la
voz de alarma.
DECIMOCUARTO BOMBARDEO EN
GRANADA 23 de Agosto de 1936.
Este día hubo dos
incursiones de la aviación republicana en la ciudad de Granada, por
la mañana dos aparatos hicieron acto de presencia, pero al igual que
en otras ocasiones fueron rechazados por la aviación del aeródromo
de Armilla, incluso uno de los aviones atacantes pudo ser alcanzado
por las ametralladoras al parecer por la forma en la que se alejó de
la ciudad.
Sin embargo nuevamente
sobre las dos de la tarde otros dos aviones pillaron por sorpresa a
la guarnición de Armilla y lograron arrojar varias bombas en la
ciudad.
La primera de ellas cayó
en un alero de la calle Verónica de la Magdalena número 13 sin
causar daños, otra cayó en los tejados entre las casas 10 y 12 de
la misma calle. En la casa número 7 algunos vecinos sufrieron
lesiones leves, todas las casas se vieron afectadas por efectos de la
metralla.
|
Veronica de la Magdalena. Foto de Torres Molina. Fondos de la Biblioteca Nacional de España. |
|
Calle Mano de Hierro. Foto de Torres Molina. Fondos de la Biblioteca Nacional de España. |
En el número 4 de la
calle Buensuceso cayó otra bomba que penetró por el tejado y que no
llegó a explosionar quedando intacta en la meseta de las escaleras.
En la calle de la Piedad
número 1 otro artefacto cayó y su metralla taladró el techo de una
vivienda del número 3, resultó herido un vecino que tuvo la
imprudencia de ver a los aviones desde la azotea.
Otra bomba más cayó en
el número 2 de dicha calle.
Sobre el tejado de la
Colegiata cayó otra bomba que causó daños en el exterior, y en el
interior tan sólo el desprendimiento de un machón de bóveda, otra
cayó en el tejado que da a la calle de la Botica sin daños.
Frente al Colegio de San
Bartolomé en el jardín que hay dónde se encuentra el Hospital
militar cayó otro artefacto.
En la calle Mano de
Hierro número 27 otro artefacto causó muchos daños materiales con
gran cantidad de cristales destrozados.
En la Gran Vía de
Granada en su número 60 hizo impacto otro proyectil, igualmente con
tan sólo daños materiales.
Calle de la Paz, Calle de
la Cruz 25, Callejón de Fuente Nueva 10, Natalio Rivas, Caleta, o el
alero del Hospital de San Juan de Dios, fueron los otros lugares en
los que cayeron otra gran cantidad de granadas, en todos los casos
sólo hubo que lamentar daños materiales, sin que se produjeran
víctimas.
DECIMOQUINTO BOMBARDEO EN
GRANADA. 24 de Agosto de 1936.
A las once de la mañana
los aviones republicanos entran en Granada, lo hacen a gran altura y
además apagan los motores para caer en barrena sobre la ciudad, lo
que hizo que la ciudad tardase en dar la voz de alarma.
Dos de los artefactos
cayeron en el interior del Hospital de San Juan de Dios, sin causar
víctimas pero sí con daños materiales, una de ellas cayó en el
departamento de Sifilicomio y otra en la consulta del doctor Mesa
Moles.
En una posada de la calle
Rector López Argüeta cayó otra de las bombas que causó daños en
una de las habitaciones.
En la Sacristía de la
Catedral de Granada cayó otro proyectil que causó una víctima.
|
Sacristía de la Catedral de Granada Foto de Torres Molina. Fondos de la Biblioteca Nacional de España. |
Otro de los proyectiles
cayó sobre el alero del Palacio Arzobispal, causando también varias
víctimas entre los transeúntes que en ese momento había en la zona.
El convento de San
Gregorio y la calle Jardines 28 fueron testigos de dos artefactos que
no estallaron.
Calle del Señor, Cuesta
de San Gregorio, Aljibe de Trillo 15 y plaza del Almez fueron otros
de los lugares en los que cayeron artefactos que sólo causaron daños
materiales.
En la calle Ventanilla el
artefacto que cayó sí causo otra víctima y daños materiales.
Número 22 de la calle
Buensuceso, calle Santa Teresa, y cerca de la Iglesia de San Jerónimo
fueron los últimos lugares en las que cayeron algunos de los
artefactos de esta jornada.
El día 27 de Agosto un
avión republicano intenta nuevamente bombardear la capital de
Granada, no sin antes dar varias batidas sobre Güejar-Sierra donde
en esos momentos y en la zona del Calar se libraba una batalla entre
dos bandos, con al parecer huida del ejército republicano ante el
avance de las tropas franquistas. Desde Armilla despegó un caza que
en combate aéreo fue capaz de alcanzar al aparato republicano el que
se estrelló en su huida por las Sierras de Guadix.
DECIMOSEXTO BOMBARDEO 28
de Agosto de 1936.
Otro día de bombardeo
sobre la capital con varios artefactos lanzados sobre la capital. El
primer de las bombas cayó en la Gran Vía número 31 sobre la
vivienda de D. Miguel Jiménez Lacal, la bomba penetró por el tejado
y quedó sin estallar en la vivienda del Sr. García-Valdecasas. En
el número 34 de la calle Párraga esquina con Gracia, estalló la
otra de las bombas que causó daños a las caballerías que allí
había.
|
Calle Párraga. Caballerizas muertas. Foto de Torres Molina Fondos de la Biblioteca Nacional de España. |
En la calle Moral de la
Magdalena número 3 cayó otro de los artefactos. En la cuesta de la
Alhacaba cayeron dos artefactos de los cuales uno no llegó a
explosionar. En la calle Tendillas de Santa Paula 5 otra cayó sin
estallar. En el Cortijo San José de Purchil y en las afueras de
Armilla cayeron el resto de artefactos que no causaron especiales
daños.
Hasta aquí llegan los
bombardeos en la capital de Granada, al menos los primeros que hubo y
de forma continua, a partir de esta fecha queda ya un gran vacío en
la prensa consultada y tan sólo nos consta de algunas incursiones en
el año 1937 de las que ya daremos cuenta en cuanto encontremos las
fechas exactas y la información concreta, es cierto que los primeros
días del alzamiento militar de 1936 fue de mucho desconcierto en
ambos bandos y en todos los frentes, pero en estas fechas y tras más
o menos el nuevo mapa de España con los dos bandos claramente
colocados en los diferentes territorios que habían conseguido
mantener o perder, el objetivo era claro Franco quería tomar Madrid
a toda costa y la República como no podía ser de otra forma la
defendería a muerte, esto hizo que los frentes de otras provincias
como el que aquí se originó entre la Capital dominada por los
franquistas y la zona Norte en manos del Gobierno de la República,
fueran en cierto modo tranquilos y sin mucha actividad militar, de
hecho se mantuvieron estables durante los tres años de contienda.
En esta entrada tan sólo
nos hemos centrado en los bombardeos en Granada capital, que al estar
ocupada por el ejército sublevado fueron realizados por la aviación
republicana, es nuestra intención abarcar que ocurrió en el resto
de la Provincia de Granada, dónde fueron los sublevados los que
arrojaban sus bombas sobre los ciudadanos fieles a la República,
obviamente las fuentes de información en este caso son más
difíciles de obtener por la férrea censura que hubo en la época,
callando todo aquello que no interesara, y debiendo de acudir a los
nuevos y cada vez más trabajos que hay sobre la Guerra Civil
Española.
No nos posicionamos en
ninguno de los bandos pues todos sufrieron bajas, y hemos tenido que
basar esta entrada en lo dicho por el diario Ideal, de claro carácter
afin a la sublevación, hemos obviado el lenguaje de exaltación
usado en las noticias de época y hemos querido limitarnos a hacer un
resumen de los diferentes bombardeos que hubo, los lugares en los que
cayeron las bombas y las víctimas que hubo.
Nos hubiera gustado dar
con la ubicación de refugios de la Guerra Civil, sin embargo en
Granada ni hubo tiempo ni luego fueron necesarios, por lo que se
usaban bajos y estructuras ya construidas para que sirvieran a tal
fin, de hecho la recomendaciones de los gobernantes era el refugiarse
en las plantas bajas de las casas, como hemos visto pocas bombas
penetraban enteramente por los tejados hasta estallar y hacer
reventar las casas, eran bombas de mala fabricación y poca potencia.
|
Hotel Alhambra Palace usado como Hospital. |
Vamos a dejar un enlace a
un mapa dónde van a figurar todas las bombas que cayeron en aquellos
días de Julio y Agosto del 36 en Granada, en los casos en los que no
quede claro la ubicación, las pondremos aproximadamente. Igualmente
en ese mapa ubicaremos algunos de los lugares de los que tenemos
constancia que fueron usados como refugios.
Hemos puesto el número
de fallecidos que según Ideal hubo, nos salen 31 seguramente sería
alguno más, pero ciertamente no es un número muy elevado, para la
de veces que hubo bombardeos en Granada. También hemos puesto
heridos cuando así lo indicaba el Ideal, pero seguramente aquí sí
que la cifra real fuera muy superior a lo indicado.
Esperemos que os haya
gustado esta entrada y en comentarios podéis opinar, comentar o
aportar datos de los que no hayamos tenido conocimiento.
|
Efectos de las bombas Foto de Torres Molina. |
|
Lavadero Hospital San Juan de Dios Foto Torres Molina Fondos de la Biblioteca Nacional de España. |
BIBLIOGRAFÍA. Diarios
Ideal desde el 18 de Julio de 1936 al 11 de Septiembre de 1936.
HEMEROTECA Casa de los Tiros.
Fondos de la Biblioteca Nacional de España.