Este blog pretende dar a conocer aquellos lugares y rincones de Granada algo menos conocidos por el viajero y por los habitantes de esta bella ciudad, pero que tienen un encanto especial, no quita que no se hable de los lugares más famosos de la ciudad, así como de costumbres y personajes. Patrimonio y cultura, monumentos y parajes naturales de Granada y su provincia. Todo ello con mucho encanto.
Declaradas fiestas de interés turístico de Andalucía, las fiestas de Moros y Cristianos se representan en varias localidades del antiplano granadino, y entre ellas destacan las que se celebran en la localidad de Cúllar.
Bando Cristiano
Se hacen el ultimo fin de semana de Abril en honor a la Virgen de la Cabeza y destacan por sus espectaculares desfiles de Moros y Cristianos y por la representación de unos pequeños actos denominados "los papeles". En ellos el primer día gana el bando moro, mientras que el segundo día, gana el bando cristiano, quedando la Virgen en manos de estos últimos y produciéndose la conversión de los moros a la causa de la Virgen.
Las fiestas se originan en el siglo XVII y han estando celebrándose de forma ininterrumpida hasta prácticamente mediados del siglo XX, dónde un hecho fortuito con la muerte de una persona y la inminente Guerra Civil, hicieron que dejaran de celebrarse hasta que nuevamente se retomaron a principios de los años 80.
Reyes Cristianos
El programa festivo se suele repetir años tras años en los 5 días que duran las fiestas y que básicamente es el que a continuación reproducimos.
Jueves: Inauguración de la Caseta de la Comparsa Cristiana.
Viernes: Salida de los antiguos Reyes y entrada de los nuevos Reyes con pregón de fiestas y Verbena en ambas casetas de comparsas moras y Cristianas.
Bando Moro
Sabado: Se lleva a la Virgen desde la Ermita a la Iglesia. Primer desfile de comparsas Moras y Cristianas y primer acto de los papeles.
Domingo: Pasacalles por la mañana, segundo desfile de comparsas y segundo acto de los papeles.
Lunes: Lunes de resaca con churros y chocolate.
Son días en los que la población de Cúllar se duplica con la llegada de amigos, familiares y turistas, y días de fiesta total con las carpas de los bandos moros y cristianos y el resto de actividades festivas.
Desde aquí no podemos más que apoyar todas las fiestas de la Provincia de Granada y animar a todos y todas a que las visitéis. Como muestra el reportaje fotográfico del que habéis disfrutado en esta entrada y que corresponde al desfile del Domingo por la tarde y procesión de la Virgen.
Virgen de la Cabeza
Las fotos corresponde al desfile del Domingo por la tarde del año 2023.
Os vamos a contar como se desarrollan y en qué consisten una de las fiestas más antiguas que se celebran en Granada con más ruido y mucho colorido. Son las fiestas de los Mosqueteros del Santísimo de Béznar, que se celebran el primer fin de semana de Septiembre.
Nos tenemos que remontar al siglo XVI para comprender el inicio de estas fiestas, los moriscos están cansados de la opresión cristiana, la sublevación de las Alpujarras está próxima. En el año 1556 un grupo de moriscos roba el santísimo de la parroquia de Béznar. La población indignada, forma una milicia armada con mosquetes y arcabuces y consiguen el rescate del Santísimo. Desde entonces cada año se rememora este acontecimiento, los mosqueteros custodian al santísimo en la parroquia de Béznar, y desarrollan el baile de la bandera en honor a San Antón patrón del pueblo y cuyas fiestas se celebran el mismo fin de semana.
Estas fiestas tienen cierta similitud con las de Moros y Cristianos celebradas en múltiples municipios de la provincia de Granada, sin embargo en este caso no hay enfrentamiento entre ambos bandos.
Los actos de la fiesta se repiten tanto el Sábado como el Domingo, y son exactamente iguales.
Los personajes más importantes de las fiestas son el Teniente o abanderado es la persona de mayor rango y lleva la bandera de España y del Vaticano.
El sargento o pica, cuyo distintivo es precisamente la pica o alabarda.
El cabo quien encabeza el desfile de los mosqueteros y es el encargado de dar el disparo del alba, y por último los mosqueteros.
Empieza la fiesta con el Alba. a las 06:00 de la mañana, el cabo acompañado de la banda, pega el primer disparo e inicia la recogida del resto de mosqueteros. A estas horas son muchos los jóvenes que acaban de terminar la verbena de las fiestas y se unen a este maravilloso momento.
En la recogida el cabo irá puerta por puerta, el cabo dispara su arma y el mosquetero que sale dispara la suya y se une al desfile, así y de esta manera los mosqueteros van desfilando por todo el pueblo. El último domicilio que se visita es el del Teniente. Una vez incorporado todos los mosqueteros se dirigen a la plaza al pase de revista.
En el pase de revista se comprueba que todos llevan sus trajes en perfecto estado, tras lo cual se inicia el homenaje a los mayordomos. Los mosqueteros van casa por casa, al ser tanto los mayordomos el acto se hace en las dos jornadas festivas, El teniente y el sargento llaman a la puerta y al salir el mayordomo toca la banda. mientras que un mosquetero efectúa un disparo.
Por la tarde y durante la celebración de la misa los mosqueteros custodian el Santísimo, para lo cual hay toda una liturgia de custodia más que ensayada y heredada a través de los años. Después se inicia la procesión de los titulares de la parroquia por las calles de Béznar, cabe reseñar que Béznar es muy pequeño y con una única calle principal que lo atraviesa, por lo que es muy probable que se corte el tráfico y que no se pueda acceder al pueblo, ojo con este dato.
Tras la procesión se produce el tremole de la bandera, el desfile, y por supuesto toda una incesante y continua salva de disparos por parte de los Mosqueteros, hay que reseñar que el disparo hace un ruido muy fuerte y potente, los mosqueteros tiene cubiertos y protegidos sus oídos, y aunque la policía local mantiene siempre una distancia de seguridad entre el público y los mosqueteros, no es mala idea llevar algún tipo de algodón o tapón que nos pueda proteger nuestros oídos.
Unas fiestas con mucho colorido por los trajes de los mosqueteros, vienen a simbolizar las flores con las que fueron agasajados los cristianos que recuperaron el Santísimo en el siglo XVI, y las moñas que simbolizan las cintas que recibieron.
Es muy recomendable ir pues Béznar no está especialmente lejos, y no hay muchísima gente, por lo que se puede disfrutar de los mosqueteros, de la procesión, de los disparos, de los fuegos artificiales y de todo sin aglomeraciones.
Aquí os dejamos un vídeo resumen de la jornada del Sábado por la noche.
El alcalde Carbonero en el c añón de encina (recreación)
En el año
1810 las tropas Napoleónicas entraron en Granada y se extendieron rápidamente por toda la Provincia, sin apenas resistencia por parte
de la población local. A continuación vamos a relatar uno de los
episodios más singulares ocurridos en nuestra provincia,
concretamente en la localidad de La Peza y que gracias al escritor
accitano Pedro Antonio de Alarcón, ha llegado hasta nuestros días.
Esta es la historia de “El Alcalde Carbonero”.
Pedro Antonio de Alarcón
1810 y las
tropas francesas ya están bien situadas en la comarca de Guadix, sin
embargo surge un contratiempo, el matadero de Guadix tiene que cerrar
por falta de reses, no hay ovejas, ni cerdos ni vacas, todo ello es
debido a la voracidad con la que las tropas francesas devoran los
alimentos. Urge buscar una solución que no tarda mucho en llegar en
forma de orden. Quedan muchos pueblos en la comarca sin conquistar,
así que las tropas irán hacia ellos y traerán todo el alimento que
encuentren. Hacia Gor, el Zenete, la falda de la Sierra y los cuatro
puntos cardinales salen columnas de soldados en busca de alimento.
Es 15 de
Abril de 1810 y entre todos esos destinos hay uno que destaca por el
carácter indómito de sus habitantes, La Peza, un lugar que ya tuvo
en el pasado un papel muy importante en la rebelión de los moriscos
y cuyas ruinas de su antiguo castillejo corona la villa.
Habitantes de La Peza en la cantina
Las calles y
avenidas de la villa están cortadas por muros de troncos de encina
cortados y otros árboles, el pueblo está lleno de leñadores y
carboneros, pero lo que más llama la atención es un gran cañón
realizado en el tronco de una gran encina, ahuecado a fuego,
reforzado por cuerdas y alambres y en cuyo interior hay gran cantidad
de pólvora, rocas, y trozos de hierro. Además el pueblo bien armado
con no más de doce escopetas, pero un número infinito de piedras de
todos los calibres, hondas para lanzarlas, garrotes, palos, hachas
cuchillos y navajas.
Manuel Atienza. Alcalde carbonero (recreación)
Y por su
puesto el ejército de lapezeños compuesto por unos 200 hombres al
frente del cual se erige D. Manuel Atienza, su Sr. Alcalde, de entre
45 y 50 años de edad, alto y fuerte y carbonero de profesión.
Vestido con alpargatas de piel de toro, tomiza y parella, medias de
lana, calzón corto oscuro, chaqueta de igual color, y chaleco
celeste de raso, todo ello coronado por un inmenso sombrero.
Malas noticias se ciernen sobre la Peza.
El alcalde
manda a Jacinto que era alguacil a por un tambor y perpetrado con la
vara de mando de la alcaldía y con y con una larga espada y una
pistola manda formar a la población, todo es algarabía y gritos
¡¡¡Viva el Sr. Alcalde!!! a lo que Atienza replica :
“- ¡Qué
alcalde y qué cuerno¡, ¡Viva Dios!, ¡Viva laPeza! ¡Viva la
independencia española!
El pueblo preparado
El alcalde dando consignas al pueblo.
Y manda al
pregonero anunciar una proclama en la que insta los lapezeños a
luchar contra los franceses, a defender su tierra y a morir como lo
hicieron los españoles del 2 de Mayo.
Todos se
dirigen a sus puestos, unos a la fortaleza de madera hecha con los
troncos de encina, otros a lo alto del cañón, los hábiles con la
honda a lo alto de la alcazaba morisca, los escopeteros camino de
Guadix y Manuel Atienza dominando todo junto a Jacinto y su tambor.
Todos a la lucha.
El cura
bendice a todos los vecinos y ayuda a preparar vendajes, las mujeres
rezan en la Iglesia y los niños se han refugiado todos en lo más
alto de las cumbres de Sierra Nevada.
Iglesia de La Peza.
El cura bendice.
A las tres
de la tarde una polvareda en el camino de Guadix anuncia la llegada
de las tropas francesas a la localidad de La Peza. Se escuchan los
primeros escopetazos que poco a poco se van acercando hacia el
pueblo. Banderas negras ondean en la Peza.
Tropas francesas en las afueras de La Peza.
200 soldados
se aproximan al pueblo, las fuerzas en número están igualadas
aunque no en calidad, ruines hombres de campo contra un ejército
preparado y bien armado que cuenta además con caballería. Manuel
Atienza, no teme a nada, no ve inferioridad, las primeras piedras
alcanzan a las tropas francesas que paran en su avance y hacen una
primera descarga de fuego que acaba con la vida de cinco vecinos.
Empiezan los disparos y el enfrentamiento.
Los
franceses avanzan y Manuel pide a todos que aguarden que tienen poca
polvora y que el cañón será lo último que se use. Nueva descarga
de tiros por parte de los franceses, en esta ocasión, los lapezeños
se tiran al suelo y no hay víctimas, todos los tiros se estrellan
contra los troncos apilados.
Escenas de la Batalla.
La distancia
es ya mínima y la caballería avanza, en ese momento el Alcalde da
la orden, la tragedia ya no tiene remedio ambos bandos disparan sus
armas a bocajarro, mientras la caballería entre un mar de piedras
llega a la empalizada degollando a cuantos encuentran a su paso,
hasta que un estruendo resuena en todo el lugar, el cañón preparado
como último recurso, ha estallado, no ha resistido la fuerza de la pólvora introducida en su interior y ha expulsado la metralla en
todas direcciones, sin diferenciar entre español o francés.
Cañón de tronco de encina tomado por los franceses.
Los
franceses se repliegan y entre la humareda sobresale la voz del
Alcalde Carbonero que anima a los suyos, poco sabe él, que la
explosión del cañón, ha hecho más daño en sus tropas que en la
de los invasores, pero estos últimos no saben de las fuerzas del
enemigo y huyen despavoridos hacia Guadix, a donde llegan a la ocho
de la noche, apedreados, heridos y humillados.
Los franceses dentro del pueblo.
La historia
obviamente no podía acabar así, herido el orgullo patrio, el
General Godinot a los cuatro días mandó a 2400 hombres armados y
preparados para la conquista de una gran plaza. Pero cuando llegan La
Peza está abandonada, no queda nadie ni en sus calles ni en sus
plazas y los lobos pasean por ellas como si nunca hubiera vivido
alguien, tan sólo algunas mujeres han bajado para dar una vuelta a
sus hogares y rezar en la iglesia, allí están confinadas en la
divina protección y en el respeto del ejercito francés, sin embargo
nada más lejos de la realidad, son mancilladas y ultrajadas en su
virtud y honor.
Los hombres
bajan de la Sierra y ofrecen combate a los franceses, pero tal y como
hacían los árabes en tiempo de la ocupación se repliegan hacia la
Sierra y empieza un encarnizado combate, por cada español caen diez
franceses, pero la diferencia numérica es superior y poco a poco los
90 hombres que sobrevivieron caen ante el empuje francés. Tan sólo
queda Manuel Atienza, acorralado por franceses en lo alto de una peña
herido, con sangre por todas partes y un trabuco con el que intenta
defenderse, las balas silbando a su alrededor, pega un último tiro y
le responde al oficial francés “- ¡Yo no me rindo!, ¡Yo soy la
villa de La Peza¡
La Peza es de los franceses y Godinot pregunta que cuantos prisioneros hay para hacerlos ahorcar públicamente y dar un escarmiento, más sólo dos hay un viejo anciano y un niño. Heroicos han sido los habitantes de la Peza, cual espartanos.
Hoy en día La Peza recrea este acontecimiento con una recreación, que año tras año gana adeptos, el pueblo entero retrocede hasta el año 1810 y nuevamente se produce la lucha entre sus vecinos y las tropas francesas.
El pueblo entero se engalana para dicha efeméride, se recrean rincones de época y no hay vecino que no vaya ataviado como a principios del siglo XIX, somos los visitantes los que damos la nota con nuestros vaqueros y polos.
El espectáculo empieza sobre las 19:30, vemos la plaza del pueblo, la escuela, el barbero, la cantina y todos sus habitantes, es un día apacible hasta que llegan las noticias de Guadix, los franceses vienen a La Peza. A partir de aquí los hechos transcurren como los relatados, las armas, la preparación del pueblo la bendición del cura y la espera de las tropas francesas junto al gran cañón de encina.a peza que muere antes de entregarse¡ rompiendo su bastón
de mando y arrojándose por la peña.
Carpinteros
Esceula
Barbero.
La acción
se traslada desde la plaza del pueblo hasta las afueras de La Peza en
el camino a Guadix, dónde tienen lugar los enfrentamientos entre las
tropas francesas y el pueblo de la Peza. El desenlace no es el
deseado, especialmente cuando ese gran Cañón estalla en mil
pedazos.
Gentes de La Peza.
Al parecer
Pedro Antonio de Alarcón, pudo conocer a testigos de esta historia a
mediados de los años 50 del siglo XIX, no hay indicios históricos
ni pruebas de que ello así ocurriera por eso a veces esta historia
navega en el barco de las leyendas.
Otro de los
puntos objeto de controversia es el lugar por el que Manuel Atienza
pudo arrojarse, unos dicen que en el Tajo de Bernite y otros que en
el Tajo de Barruecos, incluso se discute si realmente Manuel Atienza
fuera alcalde de la Peza y no fuera más que un vecino con algo más
de valentía y heroísmo.
La
recreación tiene lugar el último fin de semana de Agosto, y es toda
una experiencia y fiesta que desde aquí aconsejo, eso sí, si se es
muy sensible a los petardos recomiendo en la segunda parte mantenerse
alejado del espectáculo, pues los tiros de los franceses y los
trabucos de los españoles, son muy estridentes y casi que pueden
reventar los tímpanos sino tenemos cuidado.
HORARIO:
Ultimo fin de Semana de Agosto sobre las 19:30 horas.
PRECIO:
Gratis.
VISITA PARA
GRANADINOS: Una fiesta que poco a poco va ganando peso y se ha hecho
una imprescindible en el verano granadino con una cobertura de medios
excepcional.
COMO LLEGAR:
Para ir a la Peza hay que coger la A92 dirección Guadix, y coger el
desvío que indica hacia La Peza, se tiene que aparcar en las
afueras, sin ningún tipo de problema y dar un pequeño paseo hacia
la plaza del pueblo, conviene llegar pronto para poder coger buen
sitio.