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miércoles, 30 de enero de 2019

Trincheras de los Pocicos o Trincheras de los Llanos del Fraile.

Nido de Ametralladora. 



Seguimos nuestro paseo por las trincheras de la Guerra Civil, trincheras que han llegado en buen estado de conservación, principalmente las del Frente Nacional, y que durante los años que duró la contienda fueron la frontera entre los dos bandos.

Entrada al Refugio. Puesto de Mando. 


El frente de guerra se mantuvo prácticamente intacto durante estos años, por la difícil orografía del terreno, lo que hizo que las batallas y el avance de las tropas sublevadas fueran por otros territorios de España. De hecho salvo avances y retrocesos de los primeros días de la Guerra Civil, el resto del tiempo la línea divisoria se mantuvo prácticamente intacta.

Pozos de tiro. 


En esta ocasión nos trasladamos al lugar conocido como Los Pocicos, aunque a fecha de hoy es más conocido como Trincheras de los Llanos del Fraile y así consta en los diferentes trípticos e información editada por la Junta de Andalucía, así como en los carteles informativos.

Visual con el Cerro de la Yedra y el Pantano del Cubillas. 


Estamos ante unas trincheras que han llegado muy bien conservadas hasta nuestros días, constan de varios pozos de tirador y puestos de observación. Hay dos nidos de ametralladora y hasta un puesto de mando bastante protegido ante posibles ataques de la artillería.





Segundo Nido de ametralladora


La guarnición de los Pocicos constaba de un pelotón formado por dieciocho soldados, y una escuadra de ametralladora, formada por un tirador, un cargador y un proveedor. Las reservas de alimentos de las que disponían eran para cuatro días consistentes principalmente en garbanzos y judías para las comidas calientes y latas de sardinas e higos para comidas frías.






Para llegar a estas trincheras, desde Alfacar cogemos la carretera que nos lleva a la Sierra de la Alfaguara, y justo antes de llegar al Campamento de la Alfaguara tomamos el carril que hay a la Izquierda, lo vamos a seguir siempre hacia adelante, hasta que veamos un carril que parte a nuestra derecha y que está cortado por una cadena. Ahí dejamos el coche, y retrocedemos a pie unos 20 metros. A nuestra derecha (Que era nuestra izquierda cuando subíamos en el coche), se nos abre un gran espacio llenos de grandes pinos, entre los que distinguimos una fuente de piedra del ICONA, nos dirigimos al final de todo este espacio, y al poco veremos como hay un pequeño sendero que desciende hacia el barranco, lo tomamos, el sendero gira ligeramente hacia la izquierda y al poco ya empezamos a ver algunas de las estructuras militares. Conviene recorrer todo el recorrido lentamente para no dejarnos atrás ningún, pozo, nido o lugar de interés.

Fuente entre la pista y el sendero. 


DATOS DE INTERÉS:

PRECIO: Gratis. No aplicable.
HORARIO: No aplicable.
VISITA PARA GRANADINOS: Muy interesante para aquellos interesados en la Guerra Civil Española e ideal para compaginar con algo de Senderismo en la Sierra de Huetor.
VISITA PARA NO GRANADINOS: ídem.
COMO LLEGAR: Explicado en la entrada.

En el siguiente enlace y con el número 3 aparece la ubicación exacta de estas Trincheras. El Mapa está en renovación continua. En verde las Trincheras visitadas. En rojo las que aún debo visitar y verificar. 


MAPA DE TRINCHERAS DE LA GUERRA CIVIL EN GRANADA.


Información obtenida entre otros de "A través de las Trincheras". Itinerarios del Patrimonio Defensivo en las Sierras del Arco Noreste de la Vega de Granada.  

sábado, 26 de enero de 2019

Castillo de Íllora.

Zona de la Villa en el Castillo de Íllora. 



Recientemente ha finalizado una primera fase en la restauración del Castillo de Íllora, un castillo que ya está abierto a la visita al público, un castillo al que Lugares de Granada con encanto ha tenido el placer de poder visitar y del que vamos a intentar dar unas pequeñas pinceladas a través de este blog.

Castillo de Íllora. 


Debemos hablar de que nos encontramos en primer lugar ante una zona ocupada desde tiempos de los romanos, tal y como atestiguan los numerosos restos que se han encontrado no sólo en la fortaleza de Íllora sino también en su localidad, en la calle Ayllonas sin ir más lejos ha aparecido todo un complejo termal. Algunas fuentes van incluso más lejos y hablan de ocupación desde época íbera (siglos V a III ac. ). Lo que queda más o menos claro es que desde el siglo XI, ya podemos hablar de un núcleo de población estable, una población que pasa desde una etapa Califal, a una dinastía Zirí, para concluir con los Nazaríes, quizás la época más importante para la fortaleza pues se convirtió en un bastión en la defensa del reino de Granada especialmente desde la caída de la fortaleza de la Mota en Alcalá la Real.

El Castillo visto desde el pueblo. 


Tras la ocupación cristiana, el castillo empezó como en todo este tipo de fortificaciones una lenta etapa de abandono, la población se fue asentando en la zona llana de la localidad, hasta llegar al total abandono, en los últimos años, las casas más humildes eran las que ocupaban el recinto del castillo, incluso a fecha de hoy es posible ver varias viviendas que se apoyan en restos de los muros del recinto fortificado.

Aquí se observan viviendas aún adosadas a los muros del Castillo. 


En el Castillo de Íllora podemos encontrar tres grandes sectores, en primer lugar el Castillo o Alcazaba propiamente dicho, en la parte más superior, después una zona conocida como la villa, y el arrabal.

El arrabal visto desde la Iglesia de Íllora. 


La Alcazaba está rodeada por unos muros de tapial a fecha de hoy restaurados en gran parte, lo más probable es que todo lo que vemos sea de época nazarí. En esta parte superior encontramos hasta cinco aljibes, de los que tres de ellos afortunadamente se pueden visitar, pues a lo largo de los siglos quedaron rellenos de escombros y tierra, así que a la hora de acometer las obras de rehabilitación se han encontrado en perfecto estado. Destaca igualmente el uso de la mampostería en la construcción del recinto.

Murallas del Castillo. 


De esta parte superior del castillo se destacan un trozo de muralla que todo el mundo conoce como “Dientes de la Vieja”, pues conservan tres almenas que se conservan originales de la época.

Almenas de época "Dientes de Vieja". 


Asimismo destacable los restos que quedan de la que fuera vivienda del Gran Capitán que fue el primer alcaide de la fortaleza.

Por debajo de este recinto superior, encontramos la villa, un espacio en el que se desarrollaba la vida artesanal e industrial del complejo, en una zona aún sin excavar se presupone que estarían los restos de una mezquita, en el entramado que ha quedado a descubierto, se aprecian claramente el recorrido de las calles.

Zona de la villa sin excavar. Al fondo Torre del Homenaje. 


Por último estaría el arrabal una zona que aún no ha sido excavada en su totalidad y que sería una zona llena de viviendas adosadas al castillo y con un muro defensivo con torres semicirculares.

Puerta de acceso al Castillo. 


La visita al Castillo de Íllora empieza por su puerta de entrada, una puerta que cumple con los cánones del sistema defensivo andalusí, estamos ante una puerta en recodo, siempre hacia la Izquierda, de esa manera el brazo en el que llevamos la espada, lanza o arma queda desprotegido. Observamos claramente el hueco del rastrillo de la puerta, así como el hueco llamado buhedero por el cual se podía arrojar aceite hirviendo, piedras o cualquier otro elemento defensivo. Pero no sólo estamos ante una primera puerta, sino que una vez flanqueada accedemos a un pequeño patio y nos enfrentamos a una segunda puerta defensiva, el lugar claramente se convertía en una auténtica ratonera, pues desde las almenas superiores nos podían acribillar con las saetas.

Espacio para el rastrillo. 

"Buhedero"

Segunda puerta defensiva


Superada esta segunda puerta, no terminaba aún el calvario, pues había que superar una rampa frente a otra torre defensiva y flanquear una tercera puerta, todo esto solamente para llegar al recinto de la villa, ni siquiera llegábamos aún al recinto militar del castillo, con esto se viene a explicar que los castillos eran prácticamente inexpugnables, y tan sólo el avance en la artillería por parte de las tropas cristianas hizo posible la rendición de estos recintos.

Saetera. 

Puerta de acceso a la villa. 

Puerta en recodo. Puerta defensiva. 


En la zona de la Villa tal y como hemos comentado antes, encontramos todo tipo de estructuras, de viviendas y principalmente talleres, existe un amplio espacio sin excavar donde según las catas realizadas estaría la Mezquita. Estamos el centro artesanal e industrial de la fortaleza.

Zona de la Villa con muros y calles. 

Villa y recinto amurallado. 


También existe una gran estructura de la que todo indica que podría tratarse de una Alhóndiga.

Vista parcial de la Villa. 

Calle de la Villa. 


De entre todos los restos llama la atención una gran columna tirada en el suelo probablemente de origen romano.

Restos de posible columna romana. 


El camino sigue junto a la muralla, protegida por numerosas torres, hasta que llegamos a otro punto, donde hay también una doble puerta defensiva, de la que a fecha de hoy apenas queda nada en pie, y que sería la que daba acceso al recinto de la Alcazaba. Podemos observar los quicios de las puertas, y una curiosa inscripción árabe que dice “La victoria no es más que de ala”. En este mismo punto estaría con total seguridad el acceso al arrabal del recinto.

Inscripción árabe. 

Quicio de la puerta. 


Por último accedemos al recinto superior, la Alcazaba, a Íllora se le conoce como el ojo de Granada, y una vez en esta zona superior del recinto es fácil saber la procedencia de este nombre. Desde aquí controlamos Granada, la Vega y nuestra visión llega hasta Málaga, además con la red de atalayas y torres vigías con las que contaba el reino nazarí, en cuestión de poco tiempo el aviso de la llegada del enemigo llegaba hasta los mismísimos palacios de la Alhambra. Tanto Íllora como Moclín eran las dos grandes fortalezas que controlaban el paso desde zona Cristiana a Musulmana, eran las últimas defensas del reino. La alcazaba tiene un perímetro de 65 x 25 metros.

Parte superior del recinto. 

Parte superior del recinto. 


Lo primero que nos llama la atención en este recinto son sus aljibes hasta cinco hay en la fortaleza de Íllora, el más antiguo de época califal, a fecha de hoy sigue siendo un misterio la manera en la que se llenaban estos aljibes de agua, aparte del agua de lluvia lo cual es lógico, el agua que alimenta a la villa de Íllora viene de la Sierra de Madrid, en este punto hay dos teorías, bien que hubiera algún tipo de noria de Sangre, o bien algún tipo de sistema de tuberías a través de atanores y que por el sistema de sifón, subieran el agua a lo alto de la fortaleza.

Aljibes exteriores e interiores. 





Encontramos también aquí la Torre del Homenaje, situada en el punto más alto e inexpugnable de la fortaleza, en ella y en uno de sus muros hay restos de un primitivo graffitti, en el que se representan como ocurre con el resto de graffittis un barco entre otras figuras.

Resto de grafitti. 


Otro de las cosas que nos llaman la atención en este espacio, es restos de cuadras, y es que como ya dijimos durante muchos años, el castillo fue usado como viviendas, incluso hubo una larga época, donde aquí se cultivaban hortalizas y alimentos del campo, años en los que todo estaba en ruina y completamente abandonado.

Resto de cuadra. 


La fortaleza de Íllora fue tomada el 8 de Junio de 1486, si bien el castillo estaba perfectamente preparado para soportar un asedio, no estaba preparada para la potente artillería de las tropas cristianas, además las torres defensivas musulmanas eran cuadradas o rectangulares, lo que hacía que una vez que los proyectiles impactaban en sus esquinas, la Torre perdía toda su fortaleza y acababan cayendo.

Torres rectangulares. Malas para los proyectiles de la artillería. 


Históricamente en el año 1319 los infantes Pedro y Juan de Castilla, tomaron la villa, pero la abandonaron en su afán de conquistar Granada, desgraciadamente para ellos, perecieron en la batalla de la Vega de Granada.

El último alcaide de la villa fue el capitán Navas de Peralta en el año 1577.

Como hemos comentado anteriormente el Castillo quedó en el olvido, aunque sus piedras y muros sirvieron como cantera para la construcción de edificios y viviendas. Así año a año y poco a poco fue desmantelada.

Lugar en el que estuvo la casa del Gran Capitán. 


DATOS DE INTERÉS:

PRECIO: A fecha de hoy Enero 2019 de momento no cobran.
HORARIO: Lo fijan desde turismo de Illora. Lo normal es empezar sobre las 10:00
VISITA PARA GRANADINOS: Un lugar nuevo que acaba de abrir sus puertas, hay que aprovecharlo y visitarlo, sobretodo porque no sabes lo que depara el futuro. De momento hay que concertar las visitas con la oficina de turismo de Íllora,las organizan para grupos, pero supongo que a los particulares los agruparan en días y fechas en las que no haya grupos concertados.
VISITA PARA NO GRANADINOS: Interesante si nos gusta todo lo relativo a visitas de castillos y atalayas del reino nazarí. Illora además nos ofrece una impresionante Iglesia de traza de Diego de Siloé.
COMO LLEGAR: En este caso en coche, o incluso desde Granada a través de la línea de autobuses.

Vista parcial del acceso a la Alcazaba

Iglesia de la Encarnación de Íllora desde el Castillo. 

Puerta de entrada al recinto. 



domingo, 20 de enero de 2019

Carmen Nuestra Señora de las Angustias. Cármenes de Granada. Cármenes del Albayzín.

Jardines del Carmen



Volvemos en esta ocasión con otro de los grandes cármenes que hay en el barrio del Albayzín, el Carmen de Nuestra Señora de las Angustias.

Entrada a los Jardines. 

Entrada a los Jardines

Se sitúa en la ladera meridional del barrio, en la plaza de Nevot, es un Carmen que posee todas las características típicas de este clásico y tradicional tipo de vivienda granadina.

Viviendas del Carmen. 


A lo largo de los siglos ha ido sufriendo numerosas transformaciones, y arquitectónicamente a las primitivas viviendas se les ha ido uniendo otras anexas o se han ido haciendo numerosas obras de reformas. Pero lo que siempre ha perdurado en el tiempo ha sido su impresionante jardín cuidado con esmero y maestría.

Vista de los jardines


Igualmente y como no podía ser de menor manera, el agua ha jugado un papel fundamental en la construcción de tan paradisíaco espacio, con una sucesión de albercas, fuentes y pilares que dotan al lugar de una belleza inigualable.

Fuente

Pilar

Estanque

Como ocurre en este tipo de vivienda, partimos de una serie de paratas en diferentes niveles, en los que en el más elevado se sitúa la casa o vivienda, unas viviendas del siglo XVI y siguientes que han ido sufriendo como es lógico diferentes transformaciones pero que han sabido mantener esos pequeños elementos arquitectónicos que las hacen únicas.
Pérgola para parra. 

En el caso de este Carmen ocurre una pequeña peculiaridad y es que dentro de una de ellas y en el sótano se encuentra el localizado y conocido aljibe del Gato, aljibe que sin embargo por más que uno busque por las callejuelas del Albayzín, nunca da con él , al encontrarse en el interior de esta vivienda privada.

Aljibe del Gato. Fuente Ayuntamiento de Granada. 


El Carmen original era la casa de la derecha y tal y como manifiestan sus actuales dueños se compraron unas casas a la izquierda para constituir el actual Carmen. Sin embargo el espacio ocupado por los Jardines se ha mantenido intacto si bien en la que fue zona de huerto hubo unas casas que se tiraron abajo.

En esta imagen se distinguen las diferentes paratas. 

Zona más limpia, coincide con la zona en la que estaba el huerto. 

En lo más alto de la parcela se encuentra el estanque situado junto a una de las entradas de la casa, un estanque que hasta mediados del siglo pasado se surtía del agua de la Acequia de Aynadamar usando una red de cañerías y atanores que estaban en uso desde los tiempos de la dinastía Zirí y nazarí. Una red de agua, que poco a poco y conforme se fue creando la red moderna y actual de tuberías cayó en desuso hasta llegar a nuestros días como un testimonio de una época pasada.

Alberca del Carmen. 

Alberca, hoy en día vacía y sin uso. 



Desde este estanque situado en la parata más alta del carmen descendemos a la zona de jardines situados junto a la vivienda, una zona en la que destacan las flores como la glicinia, el rosal o el jazmín, y frutales como el naranjo, el níspero o el granado. También podemos encontrar otras plantas, arbustos como celindo, arrayán, yedra y por supuesto el parral, pues no había ni hay Carmen en el Albayzín, que no tenga su parra, pues como hemos comentado en otras entradas relativas a los cármenes del Albayzín, en Granada en tiempo de los musulmanes se consumía vino, y de hecho la palabra Carmen viene del término “Karm” que significa viña.

boj centenario. 



Otro de los elementos que encontramos en el jardín es el boj, que en este caso tal y como podemos encontrar en la Alhambra o en el Jardín botánico tiene cientos de años de antigüedad.

Por último llegamos a la parte más baja de la casa, hoy en día toda llena igualmente de árboles y plantas, pero que hace años seguramente contaba con un hermoso y fructífero huerto que abastecía de tomates y maíz, tal y como podemos contemplar en el planto del Carmen que hizo Prieto Moreno en su libro “Los Jardines de Granada”.

Esculturas. 

Pequeñas fuentes. 




En la zona más baja y que coincide con la entrada principal al Jardín, encontramos lo que se denomina el “Jardín romántico”, un bello espacio lleno de fuentes, esculturas, magnolios y cipreses.









Otro de los elementos que vamos a encontrar a lo largo y ancho del Carmen son bellas y preciosas piezas de acarreo, al parecer uno de los dueños que ha tenido el Carmen a lo largo de su historia, era un enamorado de la arqueología, en unos años en los que era fácil comprar cualquier tipo de pieza y más en una Granada y en un barrio en el que era fácil cada vez que se abría una zanja encontrar alguna pieza de valor, así podremos observar un gran número de piezas romanas y musulmanas colocadas con estilo y gusto a lo largo de los Jardines.

Toga romana. 



Capitel

Piezas romanas. 

Restos de columnas. 

Capitel califal de panel de abeja.

"Caballero veinticuatro de la ciudad...", inscripción. 

Zapata gótica




Ya y a nivel personal una de las cosas que más me gustan del Carmen son los tres bellos pilares que encierra en su interior, dos de ellos con heráldica de la que en mi blog heraldicagranadina.blogspot.com.es intentaremos darle una explicación, aunque pueden ser pilares comprados en otras ciudades de España y traídos aquí como piezas de acarreo.

Pilar

Pilar

Pilar



Otra de las cosas a mencionar, es el nombre del Carmen “Nuestra Señora de las Angustias”, casi todos al pasar por su muro exterior hemos visto la hornacina en la que había una imagen de la Virgen, y digo había, porque los dueños ante los innumerables actos de vandalismo sufridos decidieron hace unos años quitar la imagen, así que desgraciadamente a fecha de hoy tan sólo se puede ver una hornacina vacía y privada de su imagen.

Zona por la que se accede a la hornacina de la Virgen. 


No podemos tampoco dejar sin comentar un detalle de suma importancia, en uno de los maravillosos empedrados que hay en el Carmen se distingue claramente el nombre José Gago Palomo, debemos de entender que fue uno de los muchos dueños que tuvo el Carmen a lo largo de su historia, José fue un militar, teniente coronel de ingenieros, nacido en Granada el 11 de Junio de 1849, quizás sea más conocido su hermano Rafael Gago Palomo, nacido en el año 1854 y que fue un claro precursor de la coronación de Zorrilla y habitual de la famosa Cofradía del Avellano de la que formaba parte Ángel Ganivet. Igualmente fue colaborador de la revista Alhambra del insigne Paula de Valladar donde destaca con multitud de artículos y reseñas.

Jose Gago Palomo 

DATOS DE INTERÉS:

PRECIO: No aplicable. 
HORARIO: No aplicable. 
VISITA PARA GRANADINOS: Desgraciadamente la única manera de poder entrar en tan bello paraíso es que sus dueños te inviten a ello. No hay otra. Es un Carmen de Propiedad privada
VISITA PARA NO GRANADINOS: Lo mismo que anteriormente, sólo si te invitan los dueños puedes entrar, eso sí desde el exterior se puede ver un poco de su jardín a través de la cancela. 
COMO LLEGAR: Está en el corazón, del Albayzín, así que sólo andando, si subimos la Calderería, llegamos a la placeta de la cruz verde y la siguiente es la placeta de Nevot, allí encontramos la entrada.