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lunes, 19 de abril de 2021

Torre de Mingoandrés. Moclín.

Atalaya de Mingoandrés. 



La torre o atalaya de Mingoandrés se encuentra en el alto de Mingoandrés, situado en una pequeña elevación que se encuentra al este de la carretera que une Granada con Alcalá la Real a su paso por el término municipal de Moclín. 





Es una típica torre circular que conserva una altura de seis metros, aunque si las comparamos con otras atalayas similares y todas del mismo periodo dentro de la dinastía nazarí, probablemente su altura fuera de unos nueve metros aproximadamente. El diámetro de la torre es de 4,60 metros. Está construida en mampostería con piedras de tamaño grande y mediano formando hiladas. 





Ha sufrido una importante restauración, lo cual se aprecia a simple vista, y que hemos podido corroborar al consultar fotografías algo más antiguas de la atalaya. Es por esto que no conserva restos de dónde se ubicaba el posible acceso al interior de la torre, situado en una cota más elevada y al que se accedía mediante algún tipo de escala de cuerda o madera. 





La torre de Mingoandrés tiene una visual directa con la torre de la Solana, la torre de la Porqueriza y muy especialmente con el Castillo de Moclín. 






Moclín era la llave para la reconquista de Granada, pues se convirtió en el paso natural y el acceso a la ciudad de Granada. De ahí la importancia del gran número de torres y atalayas que hay en su territorio, y de ahí la importancia de una batalla de la cual ya daremos cuenta y que ha dejado nombres tan propios como el de "Cortijo de la Matanza". Es por ello que la podemos ubicar en el siglo XIV y en plena dinastía nazarí.



 


Llegar a la torres es muy fácil, nada más acercarnos a Moclín, y desde la misma carretera tendremos visual de las tres torres/atalayas que hay en el territorio, la primera que vemos es la de Mingoandrés, una vez que llegamos a la fuente conocida como "Pilarejo", justo enfrente sale un carril asfaltado en sus primeros metros, lo tomamos y lo cogemos hasta el final, antes a nuestra derecha habremos dejado la torre de la Solana que será objeto de otra entrada. El carril casi llega hasta unos cortijos a los que nos dirigiremos y una vez cerca de ellos, simplemente subiremos el pequeño promontorio para acceder a ella, no tiene pérdida pues tenemos visual de la torre en todo momento.