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domingo, 26 de octubre de 2014

Cruz de la Rauda

Cruz de la Rauda


En el Cerro del Aceituno, y justo a los pies de San Miguel Alto, hay un bello lugar, una pequeña plazoletilla, que aunque nada tiene que ver con la imagen romántica de principios de siglo sigue manteniendo su encanto, y sobre todo unas maravillosas y privilegiadas vistas sobre la Alhambra y el Albaicín. :La Cruz de la Rauda.

Vista de la Alhambra desde la Cruz de la Rauda

Iglesia del Salvador desde la Cruz de la Rauda. 


La historia de esta cruz, es difícil de averiguar y poca documentación hay al respecto. Aparece en el siglo XVI, y todo parece indicar que tendría cierta relación con la aparición de los libros plúmbeos y todo lo que originó dicho hallazgo, entre otros el que se erigieron más de 500 cruces por toda la zona del monte Valparaíso, y que desde entonces se le conoce más como Sacro Monte, de entonces tan sólo unas pocas cruces han llegado hasta nuestros días entre ellas esta de la que estamos hablando.

Antigua Postal del lugar con la iglesia del Salvador y la Alhambra al fondo. 

Foto de la Cruz con San Miguel alto al fondo. Fuente: Facebook a través
de numerosos grupos y personas. 


Recibe el nombre de Rauda, porque en esta zona estaba el cementerio de la Rauda, del cual se han encontrado bastante restos. Muy cercana a la cruz y a pocos metros está la destruida iglesia de San Luis, pendiente de restauración tras un incendio en 1933 y que en su origen era una aljama.

Virgen en la Cruz de la Rauda. 

Crucificado en la cruz de la rauda. 


La Cruz se caracteriza, por tener en un lado una virgen, y el otro un crucificado, coronados ambos por sendos farolillos. Es de piedra, la cual está muy gastada por el paso del tiempo y que ya ha tenido que ser restaurada debido a su estado de conservación. Pudiera ser que la cruz por el material empleado hubiera venido traída desde el norte por un noble señor de los que participaron en la repoblación del recién conquistado reino de Granada, pero esto es tan sólo una teoría.



Cruz de la Rauda con sus faroles. 





Para llegar lo mejor es desde la Iglesia del Salvador en el Albaicín, cruzar enfrente por la plaza Aliatar y hay que callejear un poco, por la plaza del Mentidero, cuesta del Pino, Guatimozín, Calle de San Luis, y Cruz de la Rauda, también nos podemos acercar dejándonos caer desde la puerta de Fajalauza, en todo caso, lo mejor es siempre ir andando, se puede llegar en coche, pero hay que ser un buen conocedor de la zona, y el aparcamiento es casi nulo.  

Vista aerea de Granada con la ubicación de la Cruz, en la parte baja
la Iglesia del Salvador y plaza Aliatar. 

DATOS DE INTERÉS:
PRECIO: Gratis.
HORARIO: Sin horario. No aplicable.
VISITA PARA GRANADINOS: Para llegar a este lugar debemos aprovechar cualquier paseo que hagamos por la zona alta del barrio del Albayzín, no sólo la Cruz de la Rauda, sino también la puerta de Fajalauza, o el mirador de San Cristobal, son lugares a visitar, para luego dejarnos caer hasta Casa Torcuato o Plaza Larga a tomarnos algo.
VISITA PARA TURISTAS: Este lugar lo debemos de visitar dentro de nuestro recorrido por el Albayzín, está en la zona alta, así que cuando estemos por allí, será la ocasión ideal, las vistas que hay desde aquí de la alhambra no tienen precio.
COMO LLEGAR:
En coche se puede llegar, pero hay que saber muy bien como callejear por estas calles, pues nos podemos encontrar en un callejón sin salida, para mayor seguridad se puede aparcar en los laterales de la carretera de Murcia cuando subimos hacia San Cristobal, o junto a la vieja muralla que hay un parking con gorrillas, pero con 1 euro basta.
A pie si venimos desde el centro de la ciudad, hemos de saber que vamos hacia lo más alto del Albayzín, es una buena caminata. En autobús las líneas N8 y N9. 

miércoles, 15 de octubre de 2014

Baños árabes de las Mercedarias

Baños árabes de las Mercedarias. Sala Templada


Hasta la fecha he escrito sobre lugares poco conocidos de Granada pero todos ellos visitables y además de forma gratuita. Sin embargo en esta ocasión voy a dar un salto para mencionar un lugar que habría que clasificar dentro de la GRANADA SUBTERRANEA Y SECRETA.

Los baños árabes de las Mercedarias fueron descubiertos por casualidad en el año 1984 por unos albañiles, durante unas obras de reforma en el colegio del mismo nombre, situado en el que fuera el Palacio del Conde de Vistaalegre.

Baños árabes. Arcos de Herradura. 


Se trata de unos baños situados en la antigua judería de Granada y que inexcusablemente estarían relacionados con alguna mezquita del entorno.

Por los capiteles hallados en su interior habría que datarlos de la época Almohade siglos XII-XIII.

Detalle de Capitel. 

Detalle de Capitel. 


En su interior podemos encontrar la sala fría incompleta, rectangular y con su bóveda perdida por la construcciones del colegio. Luego la sala principal o templada la que mejor se conserva aunque igualmente sin bóveda que sería esquifada y con claraboyas y lucernas pero de las que obviamente no se ha encontrado ningún resto. En el suelo y aunque en un difícil ejercicio de limpieza y observación se puede contemplar restos de la solería de mármol. 

Actualmente lo que se puede observar de forma clara es la Sala Templada. Sala con cuatro galerías, a sus lados, mientras que baños como los del Bañuelo que son visitables en la ciudad tan sólo tienen tres galerías. 


Baños árabes.



Detalle de los baños. 


El resto del conjunto es imposible verlo y ni siquiera seguir excavando pues han quedado bajo todas las obras, salas y edificaciones del Colegio de las Mercedarias.

Plano de los baños. Fuente Patronato de la Alhambra,
archivo de planos realizado sobre dibujo de
Carlos Vilchez. 


Comentar que a escasos metros se encuentra el Restaurante las Alacenas de las Monjas, edificado en parte dentro de un gran aljibe del que se piensa, podría este baño surtirse de agua.

Como bien dije antes, esta visita es inusual, y la pude realizar gracias a la Asociación Secretos de Granada.

La otra forma de acceder es poniéndose en contacto con las Mercedarias y solicitando hacer dicha visita, desconociendo cuales son los trámites, trabas o permisos con los que contar.


Es uno de tantos sitios con especial belleza y significado que de una forma casual han podido llegar hasta nuestros días, y que aunque estén en manos privadas todavía existe la posibilidad de visitarlos.

DATOS DE INTERÉS:
PRECIO: Gratis.
HORARIO: Cerrado, sólo visita concertadas.
VISITA PARA GRANADINOS: El lugar merece la pena, por ser inédito, secreto y subterráneo, pero no cuenta con una visita organizada, la única manera es conocer a alguien, que conozca a alguien que bien organice una visita o que bien, conozca a alguien del colegio de las Mercedarias y quiera enseñároslos. No hay otra.
VISITA PARA EL TURISTA: Si difícil lo tiene el Granadino, ya no digo nada del turista, así que de estos baños os tenéis que olvidar, aunque sí tenéis que ver el Bañuelo que obviamente están mejor conservados que estos.
COMO LLEGAR: El colegio de las Mercedarias se encuentra en la calle Pavaneras, pero la entrada a estos baños se hace por la Plaza del Padre  Suárez, por una puerta que hay junto a la fachada principal, justo enfrente de la alacena de las Monjas. Lo mejor es a pie desde la Plaza de Colón no tardamos ni cinco minutos. En coche particular IMPOSIBLE, pues no hay aparcamiento público y apenas parkings en la zona. En autobús las líneas C3 y C4, aunque tampoco merece mucho la pena, pues de la parada inicial hasta los baños no son ni 300 metros. 

domingo, 5 de octubre de 2014

Palacio de los Alixares

Restos del Palacio de los Alixares en el Cementerio de San José.


Lo primero que nos tiene que llamar la atención del Palacio de los Alixares es de que se trata de una antigua almunia cuyos restos los podemos encontrar dentro del Cementerio de San José, en el denominado patio de San Cristóbal en una de las zonas más altas de todo el entramado del Cementerio con una dominación absoluta de toda la vega de Granada en su vertiente sur así como del llano de la Perdiz y de la Sierra.

Vistas del llano de la Perdiz, desde el Palacio de Alixares. 


El Palacio de Alixares es o mejor dicho era una Almunia Real, un maravilloso palacio de los Reyes Nazaríes mandado construir por Muhammad V, entre 1375 y 1394.
Probablemente estuviera comunicada con la alhambra con un camino pavimentado y cercado de setos de arrayán.

Entorno del Palacio de los Alixares en el Cementerio de San José. 


Estaba formado por cuatro torres que cerraban un espacio cuadrangular rodeado de pórticos abovedados con esbeltas columnas y vidrios que reflectaban el sol.

Hasta nuestros días tan sólo han llegado los restos de la alberca, estupendamente restaurados en este entorno, el agua llegaría aquí desde el albercón del Negro en la subida al Llano de la Perdiz, y formaba parte de todo el entramado de conducciones de agua, que hay en el Cerro del Sol, y que merecen otra explicación a parte.

Alberca del Palacio de los Alixares, restos que han llegado a nuestros días. 

Aunque para nos despistar a nadie el agua que llegaba concretamente a este palacio no venia de la Acequia Real sino de la Acequia arquillos.

Habría una alberquilla, de la que manaría el agua hacia la alberca grande, la función era que se dejara en el fondo todo el lodo y fango que se venía arrastrando, aunque la finalidad del agua era la de su uso para el regadío de todas las huertas y frutales de las que se sustentaba la almunia.

Olivos como los que había en la época del Palacio.

Granado en el entorno del Palacio, al igual que en su época de esplendor
en la que toda la zona estaba llena de frutales y ricas huertas. 

Si bien hoy vemos la zona como un erial lleno de Pinos y Olivos, en la época de ocupación musulmana debemos de imaginar que era todo una zona de regadíos ayudados de la gran cantidad de agua, que a través de las diferentes acequias y sistemas hidráulicos subía desde el Darro hasta esta zona.



El poeta ibn asim lo reflejó en sus poemas.

Le afectó aquella gran sacudida y enorme terremoto, dejando allí importantes restos; los graves sucesos retrasaron su reparación que hubiera evitado la demolición de sus columnas tan hermosas, el saqueo de su revestimiento de azulejos de hermosa factura, la apropiación indebida de las piezas de mármol de alto valor, la agresión contra los árboles de su almunia de elegantes variedades y raras especies. Grande fue la pena y la tristeza (que causó) esta enorme pérdida.”

ibn asim

Y no menos famoso es el romancero viejo español de autor desconocido:

¡Abenámar, Abenámar, moro de la morería,
el día que tú naciste grandes señales había¡
Estaba la mar en calma, la luna estaba crecida,
moro que en tal signo nace no debe decir mentira.
Allí respondiera el moro, bien oiréis lo que diría:
-Yo te lo diré, Señor, aunque me cueste la vida,
porque soy hijo de un moro y de una cristiana cautiva;
siendo yo niño y muchacho mi madre me lo decía
que mentira no dijese, que era grande villanía:
por tanto, pregunta, rey, que la verdad te diría.
-Yo te agradezco, Abenámar, aquesa tu cortesía.
¿Que castillos son aquellos? ¡Altos son y relucían!
-El Alhambra era, señor, y la otra la mezquita,
los otros los Alixares, labrados a maravilla.
El moro que los labraba cien doblas ganaba al día,
y el día que no los labraba otras cien perdía.
El otro es el Generalife, huerta que par no tenía;
el otro Torres Bermejas, castillo de gran valía.
Allí habló el rey Don Juan, bien oiréis lo que decía:
-Si tu quisieses, Granada, contigo me casaría;
darete en arras y dote a Córdoba y Sevilla.
-Casada soy, rey Don Juan, casada soy, que no viuda;
el moro que a mí me tiene muy grande bien me quería.

Detalle del Romance. 


En la sala de las Batallas del Escorial en la obra la batalla de la higueruela aparece reflejado este palacio.

Detalle del Tapiz de la Batalla de la Higueruela en el Monasterio del Escorial,
donde se aprecia claramente el Palacio de los Alixares con sus cuatro torres. 

Esta batalla fue ganada por el rey Juan II, y las tropas nazaríes huyeron despavoridas hacia la fortaleza, sin embargo cuando todo presagiaba la conquista de la ciudad un gran terremoto lo truncó todo, y las tropas castellanas viendo en él el fin del mundo o el apocalipsis o un mal presagio, desmantelaron todo y huyeron sin rematar con éxito lo que podía haber sido el adelanto de la reconquista muchos años antes.

Detalle de la Alberca. 


En efecto en el año 1431 hubo en Granada una serie de grandes seísmos uno de ellos provocó la ruina de este Palacio cuyos restos quedaron esparcidos por el lugar y que nunca más llegó a reconstruirse.
Sus ruinas casi quedaron en el olvido hasta ya llegados al siglo XIX donde en la la guerra de la independencia las tropas francesas instalaron una batería en este lugar cuyos restos se pueden apreciar.

Restos de Batería Francesa junto a la alberca. 


En el año 2006 sus restos fueron recuperados y restaurados y el lugar recuperado como sitio de interés cultural.

Panel explicativo en el recinto tras su restauración en 2006. 


Detalle del Palacio de los Alixares dentro del conjunto del Cementerio de Granada. 

DATOS DE INTERÉS:
PRECIO: Gratis.
HORARIO: El del cementerio de Granada: De 08:00 a 20:00 V y de 09:00 a 18:30 I.
VISITA PARA EL GRANADINO: Ciertamente si venimos al Cementerio a lo que aquí se viene poca ganas de ver restos de un palacio vamos a querer. Lo mejor es aprovechar un Domingo que vayamos a subir al Llano de la Perdiz o al Cerro del Sol, o Silla del Moro. Para desviarnos unos minutos y verlo. Otra opción es hacer una visita de las que organiza emucesa.
VISITA PARA EL TURISTA: No es de los lugares que como turista debamos de ver, al menos que tengamos ya Granada muy vista, y busquemos nuevos sitios, o tengamos especial interés en este lugar.
COMO LLEGAR: Al estar alejado de la ciudad, lo mejor es bien en Coche particular, se puede aparcar en el parking del Cementerio de forma gratuita (aunque hay gorrilla oficial) o en autobús cogiendo la línea C4.